Estación Cultural

¡¡¡¡ Que el niño Dios nos llene de alegría, paz y felicidad !!!! p p p Fra. Angélico - Navidad Convento de San marco BENDICIÓN DEL PESEBRE Niñito Jesús, quiero acompañarte desde este rincón mirarte y cuidarte y aprender de Vos. Te voy a cuidar con una oración, te voy a abrigar con mi corazón. ¡Niñito Jesús, bendecinos hoy!

" No hay día mas perdido que aquel en que no hemos reído." Chamfort

Añadir leyenda Reina, reina reina de mamá, duérmete prontito hay que descansar. Duérmete mi reina duermete mi sol, duermete tranquila cuidándote estoy. Reina, reina reina de mamá, duérmete prontito hay que descansar. Cierras los ojitos los vuelves a abrir, el pícaro sueño esta por venir. Reina, reina reina de mamá, duérmete prontito hay que descansar. Prendida a mi pecho dormidita estas, te llevo a tu cuna y te despertás. Reina, reina reina de mamá, duérmete prontito hay que descansar. Esta nena hermosa quiere resistir, yo ya estoy vencida me quiero dormir. Reina, reina reina de mamá, duérmete prontito hay que descansar. Ríndete mi niña ríndete mi amor, yo ya estoy dormida solo faltas vos.

Aunque no hay certezas de esto, se cree que es una canción folclórica tradicional de origen español, que posteriormente fue popularizada en México. LA SEÑORA CUCARACHA SE HA COMPRADO UNA BOMBACHA TODA LLENA DE BOTONES Y ADORNADAS CON HILACHAS. QUE BOMBACHA MAMARRACHA LE DIJERON LOS RATONES PERO A DOÑA CUCARACHA NO LE IMPORTAN OPINIONES. LA CUCARACHA, LA CUCARACHA YA NO PUEDE CAMINAR PORQUE NO QUIERE, PORQUE LE FALTAN LAS DOS PATITAS DE ATRÁS.

Los invito a visitar el Blog Aplabrados de Meche Martinez, al cual fui invitada a participar. Mi primer texto es "No hay peor sordo..." ¡¡¡Disfruten las historias!!! Espero comentarios!!! http://apalabrados.blog.arnet.com.ar/

LA BENDICIÓN Todas las tardes, el príncipe Funo montaba su caballo y recorría los tres reinos que lo separaban de la princesa Fini. Mientras caía el sol, ella miraba ansiosa el horizonte desde el balcón de su dormitorio. Hasta que por fin, Funo hizo a Fini la pregunta que todo príncipe enamorado le hace a una princesa: —¿Te querés casar conmigo? A lo que Fini respondió: —¿Sabés jugar ajedrez? El príncipe sorprendido, contestó muy tranquilo que no, y la princesita se puso a llorar de una manera tan desconsolada que parecía que nunca iba a terminar. Cuando las lágrimas la dejaron hablar dijo: —Mi padre nunca nos dejará casar. —Y siguió llorando. — ¿Por qué no? —preguntó el príncipe confundido —Soy un príncipe real, un príncipe de sangre azul. Todos los reyes quieren que sus hijas se casen con verdaderos príncipes. —Para todos los reyes eso es importante —contestó Fini —pero no para mi padre. A él no le interesa que seas un príncipe o un mendigo, sino que.... ¡bua!, ¡bua!, ¡bua!, y la pri

Buen comienzo para todos...