Nunca me gusto el cuento del gato con botas. Me parece horrible que los hermanos mayores sean tan egoístas con el menor, que el maldito gato se salga con la suya, y que triunfe la mentira y la codicia. Por eso escribí mi versión del cuento y estoy mucho mas contenta ahora!!!!! EL MARQUEZ DE CARABAS U na pareja de campesinos dejó como única herencia a sus tres hijos, su molino, su burro y su gato. Los tres hermanos eran muy unidos y no necesitaron repartir la herencia, ya que seguirían viviendo juntos y trabajando el molino. En la mesa nunca faltaba algo de comer, pero tampoco podían darse grandes lujos, y por eso a veces el menor se lamentaba: —¡Ojalá tuviese mucho dinero para poder comprar todo lo que se me ocurra! —No debeis afligiros, mi señor —dijo el gato en tono serio y pausado —, ya vereis como te sacaré de la miseria. ¿No te gustaría tener mucho dinero? —¿A quien no? —Consígueme una capa, un saco, un par de botas para andar entre los matorrales y un sombrero. Tu y yo seremos ri